Un trincherazo hermoso y mayúsculo de Manolo Sánchez nos salvó del aburrimiento total en Las Ventas. Tal vez un par de verónicas suyas también valieron la pena. En ocasiones así, echo de menos una cámara más rápida, porque los tres fotogramas, sobre todo los dos últimos, no representan bien el brillo del muletazo. (Si pincháis en la foto se ve más grande)
La corrida de Juan Manuel Criado fue grandona. Además, descastada e inválida. Un lujo, vamos. En la foto, el tercer toro.
Paco Perlaza anduvo solvente, un poco pesado, pero si no ve un pitón el hombre, no le vamos a pedir que se quite porque el toro es un muermo. La foto es de su lidia al quinto, el único que tuvo dos tandas de embestidas decentes.
Ya puede rezar Sergio Marín para que se enderece su carrera. Tiene clase, pero no despega. Las oportunidades falsas, sus lesiones y, tal vez, cierta escasez de ánimo no son la mejor receta para salir del sitio en el que está.
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