...con no firmar las fotos. O con firmar sólo las de los colegas. O con cogerlas de por ahí y no preocuparse de averiguar de quién son. O, al menos, decir que se ha buscado el autor pero ha sido imposible encontrarlo (que con esto de no firmar las fotos, puede pasar).
8 comentarios:
Hola Juan,
No lo había visto hasta ahora. Aviso ahora mismo a mis compañeros y pido disculpas. En todo caso, creo que tienes mi correo para decírmelo en privado.
Haya paz hermanos ..
dos dias despues todavia sigue igual, pedir disculpas reprochando al ofendido es peor que no pedirlas.
Acabo de volver a la redacción y procedo a añadirlo. Con contestaciones de reproches, disculpas y ofendidos se van las ganas de interactuar con cierta normalidad en la blogosfera. O de escribir nada de toros.
Insisto en mis disculpas, Juan. Creo que me estoy haciendo cargo del error de un compañero con educación y respeto.
A ver,
Rosa tiene razón. Yo podía haberle escrito a ella. Me pudo el calentón de estar un poco harto de estas cosas. El malentendido se ha alargado un poco, por fortuna sin demasiada virulencia, porque he estado dos dias despegado del ordenador (por fortuna también).
Aclaro: la gran mayoría de mi trabajo está bajo licencia Creative Commons y me encanta que la gente use mis fotos para ilustrar sus historias. Ahora, no pasa nada por firmar las fotos igual que se firma una cita. Entiendo también que las fotos dan tantas vueltas que vete tú a saber dónde coño encontró Quino la foto.
La culpa Juan, evidentemente, es tuya. El día que hagas fotos malas nadie las usará para ilustrar posts y comentarios. ;)
Tiene razón Oscar. ;)
Nada como un productor de arte para que vuelvan las ganas.
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