viernes, 15 de marzo de 2013

Baby bull for Lamborghini Magazine

Un día me llega un correo de un señor, alemán él, que ha visto algunas de mis fotos, de esas de toros en los corrales con luces y sombras y eso. Por poner un ejemplo, esta:

toro-de-Victoriano-del-rio-6


Resulta que el señor alemán es el editor de la revista de Lamborghini. ¿Lamborghini tiene una revista? Pues sí, la tiene. Y es cojonuda. Esto lo supe después de que me mandara los PDF de algunos ejemplares. Brutal. En diseño y fotografía.

Bueno, pues el hombre lo que quería era lo siguiente:
Our dream would be to have a fully body picture of a black baby bull in front of a black background and a dramatic lightning atmosphere
En castellano, más o menos lo mismo que en la foto de arriba, pero con un becerro negro de un par de días. El becerro de frente y una "atmósfera de luz dramática".

A partir de ahí empezó lo mejor. Búscate un becerro negro de un par de días para hacerle la foto. Lo encontramos gracias a la colaboración de Ana Mayoral y del verdadero jefe de producción de la foto, Rafa González, a quien debo que el encargo más raro de mi vida haya salido bien. Por supuesto, hay que agradecer a los hermanos Pérez Villena que nos dejaran campar a nuestras anchas por la finca y disponer de todo cuanto necesitáramos de ella.

Encontrado el becerro hay, al menos, dos problemas. Primero, cogerlo. No lo había hecho en mi vida. Se corre. Se corre mucho. Y no siempre hacia donde uno quiere ni como uno quiere. Segundo, hazle al becerro la foto con la atmósfera dramática.

Para recrear la atmósfera tuvimos que meterlo en un chiquero de la plaza forrado con telas negras. Allí, entre embestida y embestida, había que disparar rápidamente durante la décima de segundo que "Africano", que así se llama la criatura, se estaba quieto.

Problema añadido. Estaba oscuro, muy oscuro. No había manera de enfocar. Menos mal, menos mal, que el becerro tenía ese pequeño lucero. Ahí, y sólo ahí, se podía coger el foco. Sí, tenía que haber llevado una luz fija. Ya, pero eso lo sé ahora, entonces no.

Al final, insisto, gracias a Rafa, todo salió bien.

¿Y para qué querían al baby bull? Fácil. El número 11 de la revista iba a tratar del nacimiento de Lamborghini. Como todos sabéis, muchos de los modelos más importantes de la marca llevan nombres de toros o ganaderías. Pues qué mejor forma de empezar la revista que con un becerro bravo.

Y la cosa puesta en página quedó como se ve al final de este largo post. Lo de arriba es la portada de la revista y lo de abajo la doble en la que se dan los datos básicos del nacimiento de la marca acompañados por el "baby bull" con una "atmósfera de luz dramática". No he hecho muchas fotos más difíciles. Tampoco muchas más divertidas ni de las que vaya a guardar tan buen recuerdo.

Disculpen ustedes la chapa.

LamboMagIssue11_041212_en_Final-1

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Juan, qué belleza!. Y qué orgullo! Enhorabuena.Marga

Joséphine Douet dijo...

La foto es rechula, pero que salada la historia! Enhorabuena, campeón!

Óscar dijo...

Eres el puto amo.

Julio J. Cordero dijo...

Magnifico ! amigo Juan ,para que quieres un punto de luz ,jaja

Rafael Carlevaris dijo...

Enhorabuena!!
Excelente trabajo.