sábado, 4 de abril de 2009

Adivina, adivinanza

En esta foto (que es bien mala) hay, al fondo, un colegio de visita por la plaza. Un poco más cerca, un grupo de reventas que ya andan pululando por la explanada. En el primer plano, una chica pensando en las musarañas y otra leyendo, posiblemente una guía de Madrid. El resto de elementos los conocemos todos.

Pero en la foto sobra algo. Está tomada ayer, viernes 3 de abril. ¿Qué es lo que, tradicionalmente, no debería haber aparecido en la foto?

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Las banderas?

Joséphine Douet dijo...

Los carteles?

Martín Ruiz Gárate dijo...

Las banderas, que llevan puestas al menos dos semanas ininterrumpidamente, como si todos los días hubiera habido festejo. Pero ¿qué más da? Por lo visto los detalles importan cada vez menos al taurinismo.

Corrochanito dijo...

El pasado jueves estuve por Las Ventas y allí izadas estaban las diferentes enseñas de España, la comunidad y Madrid. Como al parecer los simbolismos no sirven para nada y el respeto por las tradiciones se lo han tragado las ganas de generar "caja" lo mejor dejar las bandera puestas y así nos ahorramos al tipo que tiene que ponerlas, seguro.

manon dijo...

¡Bingo! Era bien fácil, pero no tiene que ver con ahorrarse sueldos. Esta vez no. La comunidad ha decidido aplicar a la Plaza de Las Ventas no sé qué ley de edificios oficiales (y la plaza parece que lo es) por la que las banderas tienen que ondear permanentemente. Lamentable, ¿no?

Martín Ruiz Gárate dijo...

Que la Monumental de Las ventas sea un edificio de titularidad pública no tiene nada que ver con que sea un edificio oficial. La excusa de los capitostes políticos es una imbecilidad, porque por esa regla de tres tendrían que poner banderas en los balcones todos los inmuebles propiedad de la Comunidad de Madrid, por ejemplo en los pisos de acogida de menores o de mujeres maltratadas. Y si se quiere poner como excusa el que en la plaza de toros se encuentra instalado un organismo oficial como el Centro de Asuntos Taurinos, podrían poner unos mástiles dentro del patio de arrastre para las banderas, en vez de cargarse una centenaria tradición. Es cosa de sentido común nada más. ¿Serán melones?