lunes, 7 de abril de 2008

En Las Ventas, Mario Aguilar

En capilla

Lo único interesante de la tarde lo hizo este chico mexicano de ¡16 añitos!

En el túnel

Llegó muy serio y así toreó, muy serio.

Tropiezo

Se llevó algún susto.

Ajustada gaonera de Mario Aguilar

Que es normal al torear tan ajustado. A gaoneras mucho peores que estas le han dedicado crónicas enteras no hace tanto.

Aguilar al natural

Pero no todo fueron arrimones.

Estocada de Aguilar

Remató con una estocada en lo alto, entrando bien derechito y enterrando la espada con los pies en el suelo. Le dieron una oreja. ¿Exagerada? Un novillero de 16 años que tiene valor, se queda como una estatua, torea bien, se impone a las protestas (que estas sí que fueron exageradas) para que saliera el sobrero, mata como un campeón... Creo que me sigo ablandando.

Aguilar y Juan Cubero

Los novillos, una pena, flojos y descastados salvo el cuarto, que se comió vivo al novillero con oficio de la tarde: Agustín de Espartinas, que se puso solemnemente pesado y destoreador.

Lo cuentan mejor, con más detalles y con visiones contradictorias sobre Aguilar Alma y El Capitán Alatriste, que de incógnito debutó en Las Ventas.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Efectivamente, Manon, el domingo decidí embozarme en una capa vieja prestada por don Francisco Quevedo, y echar un cauteloso vistazo por Las Ventas. Reconozco que me gustó lo que vi. La próxima vez iré al descubierto y le invitaré a un cuartillo de vino en la posta más cercana. Un abrazo.

manon dijo...

Mucho mejor el cuartillo de vino que los cacahuetes. Sin duda.

Un abrazo

Anónimo dijo...

si a la gente no le gusta lo que vea protesta, y no tiene nada que ver un sobrero, ya que los toros invalidos se protestan desde siempre